EL ROCK ANDALUZ LO INVENTO UN NAVARRO

          Jueves, 8 de Diciembre de 2016, día de la "inmaculada" o de la "purísima concepción". El ejecutivo agresivo que me viste a diario, vuelve a dejar escapar un rayito de la pasión que esconde en su interior, y de nuevo la voz de su yo aflora para hablar de aquellas inquietudes que verdaderamente enriquecen su ser; la música. Hoy se ha levantado con aires de sabiondo y a la manera de un maestro menor, quiere plasmar algo de los conocimientos que le ha aportado el acervo cultural que da el tiempo, los años, los avatares, en definitiva la vida. Esa vida que podemos comparar con una percha a la que vamos colgando prendas, con unas vivencias que pueden ser hermosas, otras tediosas, algunas sorprendentes y otras simplemente indiferentes.

          Pues sí, hoy quiero hablar del Rock Andaluz y de su origen, y con un título quizás sorprendente, vamos a indagar en quien fue el primero, al menos hasta lo que hoy se conoce.

          El boom del rock andaluz podemos decir que comercialmente se gestó en el segundo lustro de la década de los setenta, y continuó, aunque difuminándose poco a poco, en los años 80. Posteriormente volvería a aflorar con el propio resurgir del grupo Medina Azahara, que lo llevará a los estamentos más altos del éxito a finales de la decada de los 90's, manteniendo el género en un nivel aceptable hasta el día de hoy, con la irrupción de numerosísimos grupos que siguiendo su estela y aportando conceptos de su propia cosecha, van entrando y saliendo del panorama musical nacional, dígase grupos y personajes como Randy López, Miguel "Zaguán", El Pechuga, Sherish, Saraqusta, Arábiga, Taifa... imprimiéndole un carácter universal al género, pues algunos de estos artistas proceden o pertenecen a poblaciones muy distantes a la propia Andalucía.

          Ese mismo carácter de universalidad ocurrió, durante el periodo de máximo esplendor del género, en esos años finales de la década de los setenta, en los que grupos que poco tenían que ver con Andalucía, se marcan unos discos de auténtico sabor a Rock Andaluz, como es el caso de Azahar, con su excelente disco homónimo del año 79, época en la que los máximos exponentes son Triana, Alameda, Mezquita, Cai, Imán y Medina Azahara, entre otros grupos que no tuvieron tanta repercusión, aún estando llenos de una calidad excepcional como era el caso de Guadalquivir, y otros como Fragua, Goma o Mantra.      

          En estos años, hasta los artistas flamencos que gozaban de las mieles del éxito, se atreven a hacer incursiones en los sonidos del rock andaluz en sus grabaciones discográficas, como es el caso de Lole y Manuel, en el mítico disco "Al Alba con Alegría", Pepe Suero con "Andalucía la que divierte", y ni que decir tiene "La leyenda del Tiempo" del monstruo "Camarón", o Paco Herrera con "Ombligo de Andalucía". Incluso desde las hordas del rock más poderoso, Miguel Ríos plasma varios discos con ese aire andaluz, que culminará con una de sus obras maestras "Al-Andalus". A Carlos Cano lo podemos incluir con el "Very well Fandango", y en la vertiente "flamenca-fussion" más canalla, metemos a Kiko Veneno y Pata Negra.

          Si seguimos retrocediendo en el tiempo, nos encontraremos en 1975 con la magnífica obra "El Patio" de Triana. Momentos en los que aún el rock andaluz, sigue pasando algo desapercibido en el panorama musical español. Siempre había creído que este disco fue lo primero del rock andaluz, y que mis admirados Triana, eran los pioneros. Pero no. De hecho sus miembros procedían de otras formaciones, Tabaca, Gong, Nuevos Tiempos... que ya le fueron dando forma a esta expresión musical, aunque de una manera muy hetereogenea, por lo que esos discos no tenían una línea altamente definida. Incluso, por la otra rama más melódica, los ancestros de Alameda, que era un grupo llamado Tartessos, también iban vislumbrando lo que llegaría a ser el género. Y procediendo de la rama más moruna y arabesca, estaba el grupo predecesor de Mezquita, un grupo llamado Expresión, que quizás es el que mantuvo una definición más equilibrada en el conjunto de sus canciones. A pesar de todos los grupos nombrados, antes ya habían hecho sus pinitos, otros, consiguiendo la fusión de un grupo de rock, "Smash", junto con las raíces flamencas del "Manué Molina", el de "lole y Manuel".  

           Poco a poco hemos llegado a los primeros años de la década de los 70´s, y ahora nos podemos preguntar, ¿De quienes mamaron estos grupos?, ¿de quienes mamaron estos personajes?.  ¿Dónde está el germen de todo esto? Y podemos decir con toda rotundidad, que este germen se origina al otro lado del charco, en los Estados Unidos. Y podemos constatar, que nos tenemos que remontar al año 1966, en el que un exiliado español, ya cincuentón, navarro de nacimiento para más inri, guitarrista gitano, llamado desde chiquitito "el de las habicas", es el creador del género. 

          Lo de "las habicas", (el niño que se comía las habicas crudas) derivó a "Sabicas", nombre artístico de Agustín Castellón Campos. Extraordinario guitarrista, que sin saber leer ni escribir, se convirtió en un virtuoso del instrumento de las seis cuerdas, conocido y admirado internacionalmente por la velocidad y limpieza que le imprimía a las notas que brotaban de su guitarra. Sabicas nació en 1912, aprendió de niño a tocar la guitarra de forma autodidacta, convirtiéndose ya en "El niño sabicas". Tras la guerra civil española, se exilia y deambulará por toda sudamérica hasta finalmente recalar en Nueva York. Paseó su guitarra por todo el continente americano y obsequió con su flamenco a los asistentes de los numerosísimos espectáculos que dio a lo largo y ancho de toda su carrera. Influenciado por su hermano Diego se involucra en algunos ambientes jazzísticos y rockeros del Nueva York de la época y de ahí surgirá el embrión del género que hoy estamos presentando. 

       ¿Y como lo hace?, Pues hibridando sus sonidos flamencos más profundos, con los acordes más genuinos del rock procedente de otro gran guitarra, en este caso un jovencísimo guitarrista rockero llamado Joe Beck. Ambos graban el estandarte y primera pieza que se conoce del flamenco rock. La grabación se lleva a cabo en la séptima avenida neoyorquina, en unos estudios discográficos donde confluyó una oleada de talento procedente de la madurez artística de Sabicas con la innovadora fuerza y creatividad de Beck. Además estuvieron rodeados en todo momento por jóvenes músicos que darían mucho que hablar en años venideros en el ámbito del rock de todos los tiempos. En el disco participaron, además de los protagonistas Sabicas y Beck, Diego Castellón (hermano de Sabicas), Tony Levin (posteriormente músico de King Crimson), Donal McDonald, Domingo Alvarado y Warren Bernhard.   

"Rock Encounter"
grabado en 1966 y editado en 1970

          El disco se graba en el año 1966, aunque no llegó a editarse hasta el año 1970. Llevará por título el de "Rock Encounter" y hoy es una auténtica joya del coleccionismo. En él se aprecian todos los sonidos que después desarrollarán los grupos de los que hemos hablado con anterioridad. En ediciones posteriores, el disco se publica en España con el nombre de "Encuentro con el Rock". El disco tiene una duración considerable para la epoca, unos 42 minutos y está compuesto por ocho temas de una enorme calidad. 

"Zambra", canción perteneciente
 al disco "Rock Encounter" 

          Posteriormente, en el año 1971, Sabicas vuelve a publicar un nuevo disco lleno de fusión y mestizaje de rock y flamenco, en este caso, ya en solitario y sin los músicos de renombre que aparecieron en el anterior trabajo, pero con una calidad también sublime. Este segundo disco de fusión llevaría por título el de "The Soul of Flamenco and the essence of Rock" y sería publicado en 1971.

The Soul of Flamenco and the Essence of Rock
(1971)

          Después llegarían otros artistas andaluces, Manuel Molina, Paco de Lucía, Manolo Sanlúcar, y los de la vertiente más rockera que hemos nombrado con anterioridad, pero el pionero fue un virtuoso navarro llamado "Sabicas". Disfrutemos de estas grabaciones ahora que se cumplen 50 años de su creación.

          Y esto es todo por hoy, amigos. Cerremos la página del libro de la música y volvamos a nuestros quehaceres cotidianos. Hasta la próxima.