Llegó el día de hablar de Medina Azahara en este blog.
Parece mentira, pero ya pasan 8 años escribiendo artículos sobre músicos de interés, y aún no me había dado por hablar de Medina Azahara.
Intachable trayectoria la de este grupo que comenzó allá por 1979 paseando por la Mezquita, en plena ebullición del rock andaluz, y con paso fuerte, pues en sus tres primeros discos estuvo abanderado por la multinacional CBS y sólo su primer trabajo ya vendió más de 200.000 copias.
Sin embargo la etiqueta de rock andaluz y la llegada de la mediocre movida, se lo hizo pasar mal. Pero de forma impertérrita, y con la autoproducción de su cuarto disco, consiguieron aguantar el tipo durante los años 80´ y así poder llegar a tiempos mejores en los que de nuevo de la mano de una discográfica, que aunque independiente si que apostó por ellos, se auparon a lo más alto del rock nacional durante los años 90´ y entraron en el nuevo siglo por la puerta grande, pletóricos, incluso llegando a ganar los premios españoles de la música en su VIII edición, en el año 2004, con el disco Aixa, la canción Córdoba, y como mejor grupo "Medina Zahara" escribió con letras de oro su paso por la música hispana.
Muchos son los discos que Medina Azahara ha grabado a lo largo de su amplia trayectoria, muchos los que han sido galardonados con la catalogación de oro y platino, muchos han sido sus conciertos y sus discos y DVDs en directo y muchos son sus fans, que tienen distribuidos por todo el mundo, pues Medina Azahara dejó de ser un grupo andaluz en los ochenta para convertirse en un grupo internacional que ha sabido colonizar el continente americano como nadie.
Medina Azahara, tras una brillante carrera y en el cénit de la misma, se ha dado el gustazo de homenajear en este año a su grupo predecesor en estos lares del rock andaluz, haciendo una obra totalmente monográfica sobre el grupo Triana.
Es difícil que me impacte un disco de versiones, pero este trabajo, al oírlo en toda su totalidad, me ha provocado quitarme el sombrero y rendir pleitesía a un grupazo, que si ya era grande y lo tenía todo hecho en el mundo de la música ahora lo es algo más si cabe. La obra de Triana es muy profunda y compleja, y por ello se hace difícil de versionear, pero ellos lo han conseguido.
Medina Azahara ya lo había hecho en otras ocasiones, como fue en aquel disco titulado "Abre la puerta", dedicado al rock andaluz en general, en el que además de hacer versiones de Triana, también versionearon a otros grandes del género como Alameda y a ellos mismos. Pero siempre fueron versiones apuntaladas desde su visión rockera, con esa pizquita de fuerza, que a mi tanto me gusta, y que endurecen tremendamente el sonido haciendo que algunas veces no sea apto para todos los públicos.
En esta ocasión, es todo lo contrario, se mantiene la esencia global de la canción, con sus tempos, es verdad que en ocasiones se acortan y en otras se alargan, pero se mantienen muy puras en relación a la original, algo que posiblemente haya que agradecerle al productor, ni más ni menos que el Barrio, otro enamorado de los Triana. Pero lo que más engrandece este trabajo es que Medina Azahara, sin alterar el original, ha enriquecido estos clásicos con algunos pasajes introductorios, que en algunos momentos te hace dudar ¿cómo van a llegar a la melodía original del tema?, y sin embargo se llega, gracias a la capacitación musical de esta gran banda de rock, los cuales también han llenado de finura y dulzura cada punteo y cada arreglo de las canciones, dotándolas de una calidad sublime. Pueden estar orgullosos los seguidores de Triana, entre ellos yo, por este espectacular trabajo que nos hace revivir noches de amor desesperadas mientras llega el día.
Una auténtica joya musical al servicio de nuestros pabellones auditivos, y como ya he dicho en algún comentario público, gran interpretación, realizada desde el corazón y el respeto a la obra de Triana, con la colaboración de otro amigo y gran músico como es "el Barrio", y lo más importante, disco grabado con el apoyo y beneplácito de Eduardo Rodriguez Rodway, el único Triana vivo.
Disfrutemos de este bello trabajo, porque ya ha llegado el día para poder oír con toda la atención y respeto que se merece esta obra. Gracias Medina...
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